Rihanna en la Super Bowl LVII: la sorpresa era ella

Anoche se celebró quincuagésimo segunda edición de la Super Bowl, el partido que corona al equipo ganador de la liga de fútbol americano; uno de los mayores y más seguidos espectáculos deportivos del mundo, que cada año genera unos números de dinero y audiencia espectaculares.

En lo deportivo, fue un partido disputado con un emocionante final que acabó con el equipo de los Kansas City Chiefs proclamándose vencedor sobre los Philadelphia Eagles dejando el marcador del State Farm Stadium de Arizona en 35 – 38. Pero si cada año el show destaca y protagoniza informativos a nivel global es por su espectáculo musical del intermedio, ese que sabíamos desde hace meses que sería protagonizado por Rihanna.

Había muchas ganas por ver la vuelta de la de Barbados a los escenarios, tras unos años centrada en su faceta empresarial con su marca de moda y cosméticos, sin embargo el resultado quizá no terminó de ser el esperado por todos. Lejos de la espectacularidad de los últimos años, congregando a multitud de artistas invitados, fuegos artificiales y coreografías imposibles (que también los hubo), la gran sorpresa fue ella. Ya con el primer plano del show saltaba a la vista la sorpresa: ¡está embarazada de nuevo! Y quizá por eso el número tampoco fue un espectáculo de saltos, bailes y cambios de vestuario, sino que se quedó en un montaje bastante sobrio en el que, eso sí, no faltaron la gran mayoría de sus grandes éxitos, empezando con ‘Bitch Better Have My Money‘ y acabando con el que las encuestas decían que era el tema más esperado del anticipado medley: ‘Diamonds‘.

Sobre el terreno de juego se pudo ver a un exaltado A$AP Rocky, pareja de la artista y padre de la futura criatura, que no perdió detalle de una escenografía que sí estuvo a la altura de lo esperado, en sentido literal, puesto que numerosas plataformas colgantes parecían levitar sobre lo alto del estadio con numerosos bailarines e incluso la propia Rihanna, no dejando de moverse durante todo el número, dando pie a algunos planos que dejaban con la boca abierta.

Al final, a lo largo de toda la actuación, que puedes ver aquí, ninguna estrella invitada (qué fácil habría sido que apareciera Carlos Santana con su guitarra cuando sonó ‘Wild Thoughts‘ o Tom Holland caracterizado como ella misma al ritmo de ‘Umbrella‘), pero si una certeza: ¡Cuánto echamos de menos a la Rihanna cantante!

Rihanna vuelve por todo lo alto en la Super bowl

Rihanna ha vuelto a los escenarios y lo ha hecho por todo lo alto y también nos referimos al sentido literal de la palabra.

La de Barbados ha saltado al terreno de juego vestida de rojo con una puesta en escena espectacular subida en una plataforma suspendida en el aire en la que ha repasado toda su carrera con grandes éxitos como Diamonds, Umbrella o Where have you been. Acompañada por un elenco de baile todos ellos vestidos de blanco mientras destacaba su figura completamente de rojo.

Además ha sorprendido a todos con el anuncio en directo de su embarazo tocándose el vientre y dejando ver su incipiente barriguita que acoge al que será su segundo hijo.

Os dejamos aquí el enlace para ver la increíble actuación de Rihanna en la Super bowl.

Shakira & Jennifer López brillan como nadie en la Super Bowl 2020

Las dos artistas latinas fueron protagonistas del intermedio más «hispano» de la historia

Un año más, el mundo se paró ante uno de los mayores espectáculos deportivos. La final de la Super Bowl ya es todo un acontecimiento mundial, y gran parte de dicho mérito lo tiene el intermedio: escenario por el que pasan siempre gran parte de los artistas más destacados del momento.

La victoria de los Chiefs ante los 49ers de San Francisco quedó deslumbrada por, el que dicen muchos, el mejor intermedio de la historia de la SuperBowl. Un medio tiempo más latino que nunca, protagonizado por dos auténticas divas de la canción: Shakira y Jennifer Lopez. Juntas, pero no revueltas, haciendo lo que mejor saben: poner en pie a todo el personal. Después de una decepcionante actuación de Maroon 5 en 2019, la NFL tenía un reto mayúsculo para la presente edición y, por eso, tras varios meses de rumores, confirmó a ambas para coger las riendas de dicho espectáculo.

Tanto Shak como JLo prometieron convertir el espectáculo más visto de todo el año en una reivindicación mundial de la cultura y la música latina en un escenario inmejorable: Miami, cuna de tantos ídolos musicales latinos. No se achantaron ante el reto… más bien lo contrario. Ante más de 100 millones de personas como audiencia, la de Barranquilla y la del Bronx desplegaron toda su artillería. Pirotecnia, innumerables watios de luz, mucho baile y mucho color.

Todo arrancó con Shakira. El reloj marcaba, aproximadamente, las 2:00 (hora española). En ese momento, el Hard Rock Stadium dejó de pestañear mientras sonaba un buen repertorio de grandes hits de la colombiana: Whenever Wherever, I Like It, Hip’s Don’t Lie… La primera gran sorpresa de la noche la dio Bad Bunny, que interpretó a dueto con Shakira un espectacular crossover entre Callaíta y Chantaje (el temazo que popularizó Maluma).

Quince minutos más tarde, aparecía JLo. Ataviada con un traje negro de cuero, empezó su particular show con el mítico Jenny From The Block. Más tarde, resonaron en todo Miami y en los televisores de medio mundo, otros himnos: Waiting For Tonight, Ain’t Funny o Get It Right. Pero Jennifer Lopez también tenía un as bajo la manga, y subió la apuesta de Shakira a la «escalera de color» con otro de los grandes fenómenos de la música latina: J Balvin.

El espectáculo de Jennifer Lopez fue épico. Enfundada con una capa gigante de plumas que representaban las banderas de Estados Unidos y Puerto Rico, dio paso a uno de los grandes momentos de la noche: ¡la aparición de su hija Emme como líder de un coro de niños que comenzaron a interpretar Let’s Get Loud! Justo después se unió Shakira para poner, juntas… mano a mano, un broche de oro perfecto a uno de los mayores espectáculos que ha vivido la SuperBowl. Lo del año que viene es un reto, visto lo visto…