Olvida a su mujer en una gasolinera y llama a la policía para denunciar su desaparición.

Todo comenzó con un viaje París-Marruecos. A las 8:30 de la mañana, la policía francesa, recibió una llamada telefónica para denunciar la desaparición de una mujer.

Al otro lado del teléfono se encontraba un hombre de 62 años, muy nervioso, y los agentes se tomaron el caso en serio: contactaron con la brigada motorizada y muy pronto detectaron su teléfono a 300 kilómetros de distancia. Allí localizaron a la mujer en una estación de servicio: la misma gasolinera en la que su marido se había detenido casi cinco horas antes… y de la que se había marchado dejándola allí.

Y es que el hombre y su hija de 22 años —que también viajaba con ellos en unas vacaciones desde París hasta Marruecos— se habían olvidado de la madre tras parar a poner gasolina y hacer un pequeño descanso, según han recogido este domingo varios medios regionales franceses. Al retomar la ruta, no se dieron cuenta de que la mujer ya no estaba en el coche. Y tardaron más de cuatro horas y 300 kilómetros en darse cuenta.

Finalmente, el incidente no pasó de un susto: la esposa obligó al marido a regresar a recogerla en el punto donde la había olvidado antes de continuar el viaje hacia Marruecos. La conversación que mantuvieron en ese momento no ha trascendido.