Según varios medios, la estrella del FC Barcelona le dará un lavado de cara a la residencia para instalar en ella su búnker privado. Durante casi 10 años, Gerard Piqué y Shakira convivieron como pareja en una enorme mansión en Esplugues de Llobregat.
Un inmueble que ha visto grandes momentos históricos:
- Los primeros pasos Milan y Sasha.
- El momento en el que Shakira abre el frigorífico y se da cuenta de que alguien se está comiendo su mermelada y no era Pique el que metía mano en este alimento.
- Los gritos de Shakira poniendo de vuelta y media a su ex y todo el árbol genealógico de Piqué .
- La creación de grandes temas y del lema “las mujeres ya no lloran las mujeres facturan”
- He incluso la aparición de una bruja en el balcón mirando hacia la casa en la que residían los padres de Gerard.
Después de su divorcio, Shakira y Piqué habían intentado, sin éxito, vender la casa. La cantante y sus hijos se marcharon a Miami, mientras que el futbolista rehízo su vida en otro lugar con su actual pareja, Clara Chía. Tras casi cuatro años, finalmente, parece que han encontrado un comprador: Lamine Yamal.
El futbolista del Barcelona invertirá según varias fuentes una cantidad aproximada a los once millones de euros por la propiedad de la vivienda. La casa forma parte de un complejo de 3800 metros cuadrados. En ella instalará su búnker particular y está por ver si con él se establece su novia, la cantante Nicky Nicole.