El primer beso nunca se olvida, ya sea por los nervios por la buena experiencia o por la mala experiencia. Este primer beso, según encuestas internacionales y estudios culturales, ese primer beso es apenas el inicio de una larga lista: una persona besa en promedio a 21 personas durante su vida.
La ciencia del beso ha demostrado que besar activa zonas cerebrales vinculadas al placer, la confianza y el apego. Es una forma de comunicación silenciosa pero efectiva. Cuando besamos, el cerebro libera dopamina, serotonina y oxitocina. Estas hormonas fortalecen el vínculo afectivo y reducen el estrés. En una sola acción, intervienen más de 30 músculos del rostro y se estimula el sistema inmunológico. Por eso, incluso desde una perspectiva médica, besar tiene beneficios reales para la salud.
- Las personas extrovertidas tienden a besar más, especialmente durante la juventud.
- Las generaciones más jóvenes, influenciadas por la tecnología y las redes sociales, han tenido más oportunidades de interacción romántica.
- Aquellos que han estado en relaciones largas suelen reportar una cantidad de personas que besamos menor, pero con vínculos más profundos.
Te dejamos algunos datos curiosos sobre los besos:
- Besar quema entre 2 y 6 calorías por minuto.
- El 80% de las personas inclinan la cabeza hacia la derecha al besar.
- Se ha demostrado que un beso profundo activa la producción de saliva, lo que fortalece el esmalte dental.
- Besar libera endorfinas, que ayudan a combatir la depresión leve.
- El 59% de las personas afirma que un mal beso puede arruinar una conexión romántica.
Los millennials y la generación Z reportan más experiencias románticas efímeras, mientras que las generaciones anteriores tendían a formar vínculos más duraderos antes de besar a alguien.