Así lo confirma un estudio con más de 3.700 personas. El envejecimiento no solo se ve, ¡también se siente!
En el primer estudio preguntaron a personas entre los 18 y 70 años si se sentían mayores, cuántos días del mes anterior no habían dormido lo suficiente y cuánto sueño tenían. Tras un análisis, determinaron que por cada noche en la que no habían dormido lo suficiente en los últimos 30 días, la edad subjetiva aumentaba en 0,23 años. En otras palabras, los participantes se sentían 0,23 años mayores por cada día que no habían dormido bien.
A 186 participantes de entre 18 y 46 años les restringieron el sueño durante dos noches, dejándolos dormir solo cuatro horas cada noche. Luego les permitieron dormir nueve horas cada noche.
El primer hallazgo apuntó a que, después de la restricción del sueño, los participantes se sintieron en promedio 4,4 años mayores en comparación de cuando habían dormido lo suficiente. “Los efectos del sueño sobre la edad subjetiva parecían estar relacionados con el sueño que sentían”, apuntaron los investigadores.
¿Qué
pasa en tu cuerpo cuando no duermes bien?
🔹 Sube el cortisol, la hormona del estrés, que
rompe el colágeno y acelera las arrugas.
🔹 Baja la producción de melatonina, que es
antioxidante y ayuda a reparar la piel.
🔹 Disminuye la regeneración celular, lo que impide
que tu piel se repare por la noche.
🔹 Tu piel se deshidrata, perdiendo elasticidad y
luminosidad.
🔹 Tu sistema inmune se debilita, lo que también
afecta el estado de tu piel.
🔹 Se inflama tu cuerpo, acelerando el desgaste
interno y el envejecimiento cerebral.